La psicóloga Carlota Garayo Pascual escribe este artículo para el blog de Neuropsicología y Salud de la Consulta, en el que explica los cambios que se producen a nivel cerebral en las madres.
La neuropsicología de la maternidad tiene como foco principal observar cómo la experiencia de la maternidad influye en el funcionamiento cognitivo y cerebral de las mujeres. Este campo examina los cambios en la estructura y función del cerebro durante el embarazo, el parto y la crianza de los hijos. En la actualidad, la Neurociencia continúa esforzándose por desentrañar uno de los aspectos más enigmáticos del embarazo: el cerebro materno.
La maternidad representa un período de plasticidad cerebral y vulnerabilidad que facilita la adaptación a las demandas que surgen con la llegada de un bebé. Además, se caracteriza por un periodo de cambio a nivel hormonal y conductual, en el que el cerebro de la madre se ve afectado por diversas variables dirigidas en su totalidad a la crianza de los hijos. Según Bowlby (1995) “la experiencia del embarazo es una etapa en el ciclo vital que genera un proceso de redefinición, con amplias posibilidades de modificar el modelo operativo interno de la mujer”.
Cambios neuroendocrinos
Durante el embarazo a nivel metabólico se producen cambios endocrinos hormonales, principalmente en los estrógenos, la progesterona, el cortisol, la prolactina y la oxitocina. Estos cambios hormonales serán cruciales en el mantenimiento, la protección y el crecimiento del feto, relacionadas con los cambios fisiológicos y neuronales de la futura madre.
Los cambios hormonales modulan varias formas de plasticidad cerebral. La plasticidad cerebral es llamada a una serie de cambios a nivel fisiológico y morfológico en el cerebro como respuesta a la experiencia y al entorno, dando lugar a nuevas conexiones neuronales. Este proceso comprende tres vías principales: los cambios en la glía, la remodelación dendrítica y sináptica y la neurogénesis. Primero, los cambios sirven como función principal la eliminación de células dañadas y brindar nutrición a las neuronas. En segundo lugar, la remodelación dendrítica implica un acortamiento reversible y la pérdida de ramificaciones dendríticas. Por último, la neurogénesis, se conoce como el proceso por el que se generan nuevas neuronas. Cuando este sistema está listo gracias a los cambios hormonales que vienen con el embarazo y el parto, la conducta materna continúa gracias a las señales del entorno que surgen de la relación con los hijos.
Cambios estructurales
El periodo comprendido tanto antes como después del parto (periparto) está marcado por las alteraciones hormonales, la función inmune, el sueño, el estrés y las responsabilidades del cuidado contribuyendo a las alteraciones estructurales y funcionales a nivel cerebral. En diversos estudios se ha observado un aumento del volumen de la sustancia gris en el córtex prefrontal superior, medial e inferior; en el lóbulo parietal superior e inferior, y en diversas áreas subcorticales, como el hipotálamo (concretamente en el área preóptica medial), la sustancia negra y la amígdala. Además, se ha observado que cuando las áreas cerebrales mencionadas anteriormente experimentan un aumento en la cantidad de materia gris, esto se relaciona de manera positiva con la manera en que las madres perciben positivamente a sus bebés. En otras palabras, tener sentimientos positivos hacia el bebé puede contribuir a que la cantidad de materia gris en esas áreas cerebrales aumente.
- Área preóptica medial del hipotálamo: promueve la motivación maternal, dado su papel en la discriminación olfatoria para reconocer al bebé.
- Amígdala: estructura clave en el procesamiento emocional de las señales sensoriales como es por ejemplo el llanto del bebé.
- Córtex parietal: interviene en el procesamiento de la información somatosensorial relacionada con el bebé, como las caricias.
- La sustancia negra: forma parte del sistema de recompensa, que es activado a través de los estímulos infantiles, reforzando respuestas positivas de la madre hacia estos.
- Córtex prefrontal: tiene un papel integrador de las diferentes informaciones respecto al bebé monitorizando y regulando la conducta maternal en base a estas.
- Modificación de áreas de la corteza cerebral: se pueden apreciar cambios de volumen de la sustancia gris los cuales permiten a la madre medir las consecuencias de sus actos y así mismo modificar y mantener las conductas adecuadas de cara a la gestión de su autocuidado y el desarrollo óptimo del feto durante la etapa prenatal. La reducción de sustancia gris afecta principalmente a la línea media cortical anterior y posterior implicadas en la comprensión, la consciencia y la comunicación. También afecta a diversas áreas específicas de la corteza prefrontal, específicamente a las áreas asociativas localizadas en el lóbulo frontal que modulan el procesamiento sensitivo, motor y la supervisión de tareas complejas relacionadas con la cognición, las emociones y la conducta. Además, afecta a áreas temporales laterales bilateral que se encargan de la integración de la memoria y las sensaciones.
Diversas investigaciones señalan que el embarazo y la maternidad provocan cambios en lo que se conoce como el "circuito materno": un conjunto de áreas cerebrales que abarca regiones de compensación y procesamiento social. Las transformaciones que vive una mujer durante el embarazo tienen efectos notables en la forma en que interactúa socialmente o se conecta con su futuro bebé.
Desde una etapa temprana, se aprecia que las mujeres embarazadas procesan la información social de manera más efectiva, mejorando la interpretación de emociones y el reconocimiento facial. Estos procesos sociales resultan beneficiosos para adaptarse a la maternidad, facilitando a las madres la identificación de las necesidades de sus hijos, la interpretación de posibles amenazas o estímulos, y el fortalecimiento del vínculo madre-bebé. En este sentido, el apego se considera una conducta evolutiva con un valor fundamental para la supervivencia a lo largo de la historia de la especie.
Cambios en el funcionamiento cognitivo
Como veníamos comentando son los cambios de los niveles hormonales durante el embarazo los que influyen en el cerebro alterando el funcionamiento cognitivo de la mujer. A continuación se describirán los cambios más comúnes encontrados, tanto antes como después del embarazo.
- Atención
Durante el embarazo: Algunas mujeres comentan que notan cambios en la atención, como lapsos de concentración y menor capacidad para enfocarse en tareas específicas. Siendo la principal atribución a factores hormonales y emocionales.
Después del parto: La falta de sueño,común en las nuevas madres debido a las demandas del bebé, puede afectar negativamente la atención y la concentración.
- Memoria
Durante el embarazo: Algunas mujeres pueden experimentar dificultades temporales en la memoria, como olvidos más frecuentes. Esto se ha asociado con cambios hormonales y la preparación del cuerpo para el parto y la maternidad.
Después del parto: La falta de sueño y el estrés pueden afectar la memoria a corto plazo. Sin embargo, la memoria a largo plazo generalmente no se ve afectada de manera significativa.
-Funciones Ejecutivas
Durante el embarazo: Pueden experimentarse cambios en las funciones ejecutivas, como la planificación y la toma de decisiones. Las fluctuaciones hormonales y los cambios en las prioridades pueden contribuir a esto.
Después del parto: Las nuevas madres a menudo deben equilibrar múltiples tareas y tomar decisiones rápidas, lo que puede afectar las funciones ejecutivas. Sin embargo, con el tiempo, muchas mujeres desarrollan estrategias para lidiar con estas demandas.
Es fundamental reconocer que estos cambios son en gran medida normales y temporales. La plasticidad cerebral y la capacidad de adaptación permiten a las mujeres ajustarse a las demandas de la maternidad. Además, el apoyo emocional y práctico puede mitigar algunos de los desafíos cognitivos asociados con el embarazo y la crianza de hijos.
En caso de que una mujer experimente cambios significativos en su funcionamiento cognitivo o tenga preocupaciones, es aconsejable que hable con su profesional de la salud para obtener orientación y apoyo específicos.
RESUMEN Y RECURSOS
En resumen, la neuropsicología de la maternidad revela que la experiencia maternal induce cambios hormonales y estructurales significativos en el cerebro de las mujeres. Estos cambios favorecen la adaptación a las demandas de la maternidad, promoviendo la motivación maternal, procesamiento emocional y fortalecimiento del vínculo madre-bebé. La plasticidad cerebral durante el embarazo y la crianza demuestra la importancia evolutiva del apego en la supervivencia de la especie. Para concluir, me gustaría recomendarles una fuente adicional de conocimiento y entretenimiento de modo auditivo y visual. En primer lugar, les dejo un video explicativo al que tienen acceso directo a través del siguiente código QR. El video ofrece una perspectiva única y profunda sobre la neuropsicología de la maternidad, complementando las reflexiones abordadas en nuestro artículo. Además, les invitamos a sumergirse en el mundo del podcast donde expertos destacados discuten a cómo influye la maternidad a nivel cognitivo y emocional. Esta fuente auditiva les proporcionará una experiencia enriquecedora y perspectivas adicionales para ampliar su comprensión sobre el tema.
Podcast
Bibliografía
Guzman, M. T. M. (2011). Maternidad y Neuroplasticidad.Revista digital universitaria. Volumen 12 Número 3.ISSN:1067-6079.
Chamorro Mejía, D. N. (2022). La neurobiología del vínculo materno-filial durante la etapa prenatal (Bachelor's thesis, PUCE-Quito).
Escolano-Perez, E. (2013). Maternal brain and its implications for the human development. Revista de Neurologia, 56(2), 101-108.
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