La psicóloga Cristina Vizuete escribe el siguiente artículo para el blog de la Consulta sobre la depresión, donde explica de forma clara y sencilla en qué consiste, cuáles son los síntomas, qué hacer si los observas en ti mismo o en alguien cercano y cómo se puede tratar.
Puedes escuchar el podcast sobre este tema haciendo click en el siguiente enlace.
“En mi interior daba igual si el día amanecía soleado, si hacía la temperatura perfecta o si las personas a mi alrededor se mostraban felices. Dentro de mí siempre había una tormenta violenta desatada, que dejaba fría el alma. Con el paso de los meses, aprendí a mimetizarme con mi entorno. Sonreía cuando había que sonreír. Callaba cuando había que callar… Y tan solo veía pasar las horas, con el único incentivo, de volver a casa, a mi cama.
Donde no hacía falta fingir, donde podía estar horas con la mirada fija en la pared, sin dar explicaciones. Con la esperanza de quedarme dormida. Dormir de algún modo, me ayudaba a desaparecer un tiempo, a poner la vida en pausa. Aun a sabiendas de que esa sensación de desasosiego que siempre me acompañaba seguiría conmigo al despertar. Esa mala compañía, que me alejaba cada vez más de mi trabajo, de quienes quería y de todo aquello que me había importado en algún momento. Esa mala compañía, que logré ir alejando de mi vida, cuando pedí ayuda”.
¿Cuántas veces hemos escuchado frases como “Hoy amaneció el día nublado y estoy como depre”? “Depre”, ese término acotado y con matiz cariñoso que hoy en día se atribuye a un simple estado de tristeza, casi como un sinónimo. Tan popular actualmente, que se encuentra reconocido por la RAE a modo de referencia a una persona con carácter depresivo o al síndrome depresivo.
Es importante hacer esta alusión, en la que en la actualidad se hace mucho hincapié, para devolverle a la palabra “depresión” el realismo y la complejidad que tiene. Porque lo cierto es que, la depresión es algo más severo que vivir un día triste o desanimado. Es un trastorno del estado del ánimo, que altera el bienestar y la salud, por un largo periodo de tiempo.
Si solo me siento desanimado un único día, lo que estoy sintiendo es tristeza. Y es verdad que la depresión se caracteriza, en su esencia, por este sentimiento. Pero también por otras exteriorizaciones como:
- la incapacidad para sentir placer;
- la falta de interés, tal y como se expresa en el relato del inicio;
- los sentimientos de incapacidad o inutilidad;
- sentir culpa;
- falta de autoestima;
- llantos recurrentes;
- falta de energía;
- insomnio o, por el contrario, dormir demasiado;
- comer sin hambre como búsqueda de alivio, o puede darse, de la manera opuesta, pérdida del interés por la comida;
- también pueden producirse pensamientos suicidas o deseos de estar muerto;
- pérdida del sentido de la vida;
- a veces puede acompañarse de síntomas físicos persistentes, como dolores de cabeza o problemas digestivos.
Esta sintomatología debe estar presente, aproximadamente, un mínimo de dos semanas consecutivas, dependiendo de la especificación del trastorno. Ya que, dentro del concepto comúnmente conocido como “depresión”, la clínica distingue numerosos trastornos depresivos, cada uno con matices y connotaciones diferentes que los distinguen entre sí. Unos son de carácter más leve, como la “desregulación disruptiva del estado de ánimo”. Otros presentan mayor gravedad, como, por ejemplo, el “trastorno de depresión mayor”.
Se estima que en Europa, incluida España, la depresión es una enfermedad que tiene una prevalencia del 4% de la población. Con una probabilidad del 10,5% de que se padezca alguna vez en la vida (Baile, 2018).
Si te sientes identificado con los síntomas y crees que puedes estar padeciendo depresión, ¿qué puedes hacer? El primer paso para recuperarte es acudir al médico de cabecera o contactar con una clínica especializada en psicología y psiquiatría.
¿Es posible recuperarse de una depresión? Sí, es posible. Requiere de hacer un pequeño esfuerzo y acudir a un especialista ¿Qué tratamientos puede proponerme el especialista? Los tratamientos para la depresión pueden ser de dos tipos: farmacológicos y psicológicos. La combinación de ambos suele ser lo más eficaz. Se sabe que la combinación de la psicoterapia con la farmacoterapia, en los casos que se requiere, produce mejoras, hasta en un 60% de los pacientes.
Los fármacos que se emplean son de diversas familias, como los tricíclicos, los inhibidores selectivos de la recaptación de diversos neurotransmisores o moduladores de los neurotransmisores. Determinar el fármaco más adecuado y la dosis correcta es trabajo del médico psiquiatra o del médico de cabecera.
Por otra parte, el equipo de psicólogos y profesionales capacitados para la psicoterapia ayudan a los pacientes con diversas técnicas. Algunas de ellas, son: Terapia de la conducta, Terapia Cognitiva, Conductual, Cognitiva-conductual, interpersonal o sistémica.
Por tanto, el primer paso a dar, cuando se piensa que se puede estar sufriendo un trastorno depresivo es hablarlo con el médico o buscar una clínica de psicología de tu confianza y acudir a ella. Los profesionales determinarán si lo que está aconteciendo es un trastorno depresivo, un trastorno adaptativo o un malestar ante los problemas de la vida.
Porque cuando sentimos que las cosas no están bien, no tenemos por qué sobrellevarlo.
Como se decía en el relato del principio “Depresión, esa mala compañía, que me alejaba cada vez más de mi trabajo, de quienes quería y de todo aquello que me había importado en algún momento. Esa mala compañía, que logré ir alejando de mi vida, cuando pedí ayuda”.
Cristina Vizuete Villegas
Psicóloga General Sanitaria
Referencias Bibliográficas
Álvarez, M. P., & Montes, J. M. G. (2001). Tratamientos psicológicos eficaces para la depresión. Psicothema, 13(3), 493-510.
Asociación Americana de Psiquiatría. (2019). GUÍA DE CONSULTA DE LOS CRITERIOS DIAGNÓSTICOS DEL DSM-5. Madrid; EDITORIAL MÉDICA panamericana.
Baile, J. I. (2018). Psicología Clínica y de la salud en adultos: manual de casos. Madrid; Ediciones CEF.
García Navia, J. T., & Rosete Gamboa, E. M. (2002). Tratamiento farmacológico de la depresión mayor. Revista Cubana de Medicina General Integral, 18(3), 213-219.
Haley, J., & Richeport-Haley, M. (2006). El arte de la terapia estratégica (Vol. 91). Grupo Planeta (GBS).
Ortiz, D. (2008). La terapia familiar sistémica. Recuperado de: https://dspace.ups.edu.ec/handle/123456789/6096
Pérez, M., Fernández, J. R. (2015). Guía de tratamientos psicológicos eficaces I. – Adultos. Madrid; PIRÁMIDE. Real Academia Española. DEPRE. Recuperado de:
Vázquez, F. L., Muñoz, R., & Becoña, E. (2000). Depresión: diagnóstico, modelos teóricos y tratamiento a finales del siglo XX. Psicología conductual, 8(3), 417-449.
Comments