La neuropsicóloga Guadalupe Chiclana publica este artículo para europapress.
¿Conoces cuál es tu capacidad de adaptación a las dificultades de la vida? ¿Crees que los problemas en tu vida diaria surgen por azar o puedes influir en ellos?
Darwin en su principal obra, El origen de las especies, cuenta que no son los más inteligentes o los más fuertes los que sobreviven, sino los que han sido capaces de adaptarse al medio. En psicología se define resiliencia como cualidad del ser humano que le hace crecerse ante las dificultades.
Todo ser humano tiene capacidades y herramientas para ello. Y además podemos mejorar nuestra capacidad de adaptación conociendo cómo son los siguientes aspectos en mi vida:
1. LAS CONEXIONES CON LOS QUE AMAS.
El deseo de amar y sentirse amado es un motor que nos puede ayudar a superar cualquier dificultad que se nos presente.Estas conexiones están desde que nacemos y crecen en las vivencias que tenemos con las personas importantes para nosotros (padres, hermanos, profesores, pareja, etc.)
Estos deseos de amar y ser amado mejoran nuestra capacidad de comunicación, nos ayudan a crear lazos fuertes y nos hacen apoyarnos entre nosotros. Las personas conectamos a través del lenguaje, de aquí la importancia de escuchar y hablar.
Si mis lazos afectivos son fuertes, podré hacer frente a la adversidad más exitosamente, ya que estas relaciones nos protegen creando un "escudo" de seguridad.
Como me contaba María hace tiempo: "Salía del trabajo con mi carta de despedido en la mano, me entraron ganas de coger el primer vuelo a una isla desierta y correr, no saber nada de este mundo injusto. Llegué a casa, mi madre me dio un beso al llegar, le conté que me habían despedido y con una gran sonrisa me dijo: hija, tu valor está en ti misma, no en dónde trabajes, o lo que hagas.
Hablamos durante un rato, después me pidió que le ayudara a ordenar unos libros, me di cuenta que en ese lugar me sentía segura y mi familia era mi isla desierta donde poder tener fuerzas para aguantar lo que viniera".
2. YO PUEDO INFLUIR EN LOS SUCESOS QUE ME OCURRAN.
Otra herramienta para afrontar los problemas es saber que puedo tener el control en mí mismo: ser el director de la orquesta de mi vida.Si te responsabilizas de la situación y confías en tus capacidades, tendrás más éxito en la toma de decisiones para resolver los problemas.
Esto significa ser autónomo, pensar que la situación depende de mí mismo, y poner las esperanzas en mis capacidades. El rumbo de mi barco está en mis manos más que en el devenir de las situaciones.
Cuántas veces hemos pensado que nos han suspendido un examen o justificamos un retraso por el tráfico. Yo puedo influir en que esto sea diferente: "Debo cambiar mi forma de estudiar, o debo salir con más tiempo".
3. PROGRAMAR MIS DECISIONES.
Observándote a ti mismo puedes encontrar respuesta a los sucesos que te ocurren, conocer tus talentos, tus recursos y tus defectos.
Dedica un momento a examinar tu interior y da una respuesta a la pregunta "¿Por qué actúo así?". Mirar hacia dentro nos ayuda a mantener el equilibro interior independientemente de lo que ocurra en el exterior.Podemos predecir el resultado de lo que hacemos, conociendo cómo lo hice en el pasado y qué soluciones puse.
Si quiero programar mis decisiones de forma exitosa, tengo que utilizar la herramienta autocontrol. Si soy consciente de que puedo diseñar una decisión, venceré las situaciones difíciles, y crecerán mis pensamientos de poder.
Elena siempre se quedaba en el trabajo más horas de las que le correspondían. Siempre su jefe aparecía en el último minuto, se sentía incapaz de decir que no. Un día se dio cuenta que eso le había pasado siempre no podía decir que no a sus amigos, a su familia, a los favores que le pedían aunque no le vinieran bien. Decidió cambiar de actitud, entró en el despacho de su jefe y le expuso las razones por las que ella prefería irse a su hora. Aunque temía un despido, su jefe le agradeció su sinceridad y su trabajo y Elena se dio cuenta que parte de las cosas que pasan en nuestra vida están en las cosas que podamos hacer, enfrentándonos a ellas con un diseño adecuado.
4. CONFÍA EN TI MISMO.
La mayor libertad es ser fiel a ti mismo. Si crees en ti profundamente, creerás en los cambios que necesitas que sucedan.
Descúbrete a ti mismo y valora esas capacidades que tienes y ponlas en marcha para ti mismo. Dependiendo de cómo te autoevalúes, así será tu autoestima.
¿Qué elementos son necesarios para tener autoestima?
1. Convierte lo negativo en positivo: Nunca pierdas las ganas de pensar en positivo, invierte todo lo que parezca mal o que no tiene solución.
2. Acéptate a ti mismo: es importante aceptar que, con nuestras cualidades y defectos, somos, ante todo, personas importantes y valiosas.
3. Esfuérzate por mejorar: piensa qué te gustaría cambiar de ti mismo o qué te gustaría lograr. Establece metas a conseguir y esfuérzate por llevar a cabo esos cambios.
4. Construye tu programa de vida: el que tú quieras diseñar. La película que quieras dirigir.
5. Dedícate tiempo a reconocer tus cualidades.
Un arquitecto secuestrado hace años contaba cuando fue liberado que confió en su capacidad de organización y en el hecho de ser una persona metódica para sobrevivir: se organizó un horario, y cumplía su rutina diariamente. Este punto fuerte le ayudó a mantenerse mentalmente sano y salir adelante.
Si la opinión sobre ti mismo es positiva, entonces serás más resiliente. ¡Busca tus puntos fuertes!
5. PENSAR EN POSITIVO
El mayor amigo de la adversidad es el miedo "imaginario" que nos paraliza.
Nuestra forma de ver el mundo influye en nuestro estado de ánimo y viceversa.
¿Qué nivel de esperanza tienes del futuro? La esperanza es la clave del pensamiento positivo.
Dos trabajadores de una empresa de calzado fueron en busca de nuevos mercados a una región de África, al llegar, se dieron cuenta que iban descalzos. Tras días de observación, ambos mandaron un informe de la situación a la empresa. Uno de ellos, decaído expresaba: "Desastre total, aquí no hay negocio, van siempre descalzos". El otro trabajador, daba su punto de vista: "¡Éxito total! Todos van descalzos! Enviad el material para comenzar la promoción".
Si buscas aspectos positivos, incluso de las peores situaciones que hayas podido vivir, estarás mejorando tu visión positiva del futuro y, por lo tanto, mejorando tu capacidad de afrontamiento.
6. SABER EL SENTIDO DE TU VIDA
Cuando todo marcha bien, no nos planteamos el sentido de nuestra vida. Simplemente vivimos.
Victor Frankl, que sobrevivió a la vivencia de los campos de concentración, resalta que debemos buscar la razón de ser de las cosas, ya que esa razón es la fuerza fundamental que mueve a los seres humanos.
¿Cuáles son las razones que mueven tu vida? Conocer esas razones te dará seguridad y dará fuerza a tus motivaciones para vencer los problemas que aparecen en el día a día de forma exitosa.
Las habilidades para ser la mejor versión de ti mismo están dentro de ti, sólo tienes que conocerlas y ponerlas en marcha. ¡Adelante!
Guadalupe Chiclana Actis
Neuropsicóloga